martes, 13 de diciembre de 2016

Carta desde el corazón

Hola,

Soy el corazón.

Sé que puede parecer pretencioso decirlo así pero vine para dar vidilla aunque en realidad sin vosotros no soy nada. ¿Que es un corazón sin sus miembros?. Nada. Un corazón, así, sin más, sin estar dentro de un cuerpo conectado al resto de los miembros es un trozo de carne inútil.

Me lo advirtieron antes de llegar. Está todo un poco frío. Demasiados años de sobrecarga. Siempre haciendo lo mismo. Están muy cascados. Necesitan sangre nueva.

Que vayas a un cuerpo que no es el de siempre, donde todo ha ido funcionando un poco por inercia y todos andan cansados no es alentador. Pero yo pensé que necesitaba sentirme útil. Porque demasiado corazón y poca acción tampoco sirve de mucho. "Voy allí donde hago falta" pensé. Así somos los corazones. Unos románticos.

Llevo aquí dentro un tiempo y me está costando adaptarme. Tenía miedo al rechazo. Algunos cuerpos lo hacen. Llega un órgano nuevo y reaccionan muy mal. Intenté hacerlo lo mejor posible aunque creo que estuve cerca del colapso. Pero cada nuevo día me decía, "tu sigue latiendo". Y en otras ocasiones "Tranquilo" ¡¡No te aceleres!!. 

Pero era complicado no acelerarse allí. Mucha acción y luego cada uno a su aire. El cerebro dando instrucciones. Los pies que tenían que andar juntos iban cada uno a su bola. La nariz se quejaba de que de vez en cuando una mano no le dejaba ni respirar y la lengua que el dedo se le metía en la llaga. Los ojos me miraban sin saber que decir hasta que un día me dijo la boca. "Tu ahora estás muy agobiado porque todo es nuevo, estás aprendiendo, pero escúchame, cuando te acoples vas a estar muy bien".

Claro eso me tocó la fibra. Ya se sabe que con las palabras se puede llegar al corazón fácilmente y estas me parecieron muy sentidas,  muy en mi línea y me sentí un poco más acompañado.

Ahora ya llevo un tiempo y creo que aún no acabo de acostumbrarme. Siento que somos un equipo que no sabe que lo es. Pero creo mucho en nosotros, tanta experiencia acumulada es un gran `potencial. Si todos fuéramos a una y dejáramos de fijarnos tanto en el ombligo, si sirve para algo o no, lo absurdo que es, bueno, pues hasta el ombligo podría hacer algo y sé que hasta al cerebro le parecerá imposible.

La cuestión es ponernos de acuerdo. Que por separado no vamos a ningún lado. Que obras son amores y a mi como buen corazón me gustan los amores y las obras. Que ya está bien de quejarse por un lado y de fastidiar por el otro. Creo que si nos diéramos cuenta de lo enriquecedoras y necesarias que son nuestras diferencias y peculiaridades. Si nos fijáramos más en lo bueno que cada uno tiene,  que cada uno tiene una función, que cada uno hace bien algo, en vez de fijarnos en lo que no sabe hacer bien el otro, lo que me molesta de él, podríamos hacer algo grande como por ejemplo, desarrollarnos como cuerpo y sentir felicidad y bienestar, producir, endorfina y serotonina y todas esas "inas" que dicen que van tan bien para el bienestar de todo el cuerpo en general.

Pero vamos que yo aquí no soy nada. Sólo un corazón trasplantado en un cuerpo con un gran potencial y mucha experiencia. Eso si, no diréis que me falta sangre y que no os doy el calor que necesitáis porque me esfuerzo mucho. Seguro que habría corazones mejores por ahí pero tan dedicados lo dudo. Trabajando dia a dia para fortalecerme. Porque nunca sabremos por lo que tendremos que pasar. Sea lo que sea mejor estar preparados.

Queridos miembros. Poco a poco me vais conquistando. Se nota que he tenido suerte de ir a parar a un cuerpo de calidad. Cuando estemos en plena forma, no me cabe duda, si queremos, entre todos, podríamos funcionar muy bien y sorprender a muchos que antes no habrían apostado por nosotros.

No pierdo la esperanza.

Porque mientras haya vida aquí estamos, para latir donde haga falta.

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